Es
un bizcocho diferente, se hace muy rápido (en unos 20 minutos más el horno) y
es ideal para tomar café con amigos… Queda muy esponjoso y su toque a canela le
da un atractivo diferente a cualquier bizcocho más típico como puede ser el clásico
de yogur… Esta receta la he sacado de una amiga bloguera llamada Hilmar que es
toda una experta en panes y bizcochos (además de otras cosas) por lo que os
recomiendo que la visitéis en www.misrecetasfavoritas2.blogspot.com, seguro que os sorprenderá.
INGREDIENTES: Para un molde rectangular (8
personas aprox.)
3
huevos
250
gr de azúcar
12
gr. de mantequilla
250
ml de leche (preferiblemente entera)
250
gr de harina (preferiblemente de repostería)
1
cucharadita de canela en polvo
1
cucharadita de levadura
ELEVORACÍON:
Lo
primero que vamos a hacer es batir los huevos con el azúcar, la cual la
incorporaremos en forma de lluvia junto con la canela, hasta que estén espumosos y hayan
duplicado su tamaño. Yo lo hago con una batidora eléctrica.
Agregamos
la mantequilla que la tendremos a temperatura ambiente para que se integre
mejor con el resto de los ingredientes y la leche y lo mezclamos todo bien
(también con la batidora eléctrica)
Y
ahora es el momento de incorporar la harina tamizada con la levadura poco a
poco y lo mezclamos con una varilla manual.
Lo
vertemos en un molde previamente untado con mantequilla y harina y lo horneamos
durante 45 minutos aproximadamente a 180ºC.
Y
ya tenemos nuestro fabuloso bizcocho de leche y canela, no me diréis que no es
sencillo y rápido. Así que ya no tenéis escusa para hacerlo y os saca de un
apuro…. Je je je…
CONSEJO: Por cierto, lo podéis hacer y
congelarlo y así cuando os venga una visita… un par de horas antes lo
descongeláis y ya tenéis con qué acompañar al café… seguro que vuestros amigos
estarán encantados.
Espero
que os haya gustado la receta tanto como a mí.
Los dulces de Anabel